En una carrera digna del mejor campeonato de la historia de la Fórmula 1, solo la última vuelta decidió la suerte del título. Lo que parecía una victoria sin atenuantes para el siete veces campeón Lewis Hamilton se esfumó entre situaciones inesperadas, alguna decisión fallida dela escuadra Mercedes, y la constante toma de riesgos por parte de Max Verstappen y su equipo, el RedBullRacing. Habría sido tan justo que lo ganara Hamilton como lo es el hecho de que a los 24 años, el neerlandés consigue, por primera vez en su campaña, ser campeón de automovilismo, y nada menos que de la máxima categoría del automovilismo mundial.
Durante prácticamente todo el Grand Prix de Abu Dhabi, y de la misma manera que había ocurrido en la recta final del torneo, Hamilton y Mercedes mostraron una evidente ventaja técnica con el W12 sobre Verstappen, el RB16B y RedBull. Estos se defendieron con agresividad, en la pista y en la estrategia, por momentos en el límite de lo legítimo y, a propósito de un inesperado safety-car, regalaron una última vuelta sensacional, fabulosa, emocionante, digno broche de una temporada magnífica, extrema, por razones que ya se desandaron aquí.
Los dos pilotos más capaces y dotados del momento en todo el planeta, habían acumulado más que suficientes méritos para quedarse con la corona. Tanto que la carrera, como se presumía, no terminó con la bandera a cuadros...
Hagamos la disección de la prueba, con el fiel de la balanza activado:
Largada: Verstappen con cubiertas blandas pero con menos carga de alerón trasero, por la parte limpia de la pista, tarda 10 centésimas de segundo más en reaccionar que Hamilton, que lleva neumáticos medios y un alerón más grande, pero que pese a partir por la calle sucia de la recta principal, dobló adelante en la primera curva. Ventaja Hamilton.
Curvas 6 y 7: El piloto de RedBull necesitaba imperiosamente mandar en la carrera, dada la imperiosa necesidad de aire limpio para que sus cubiertas rojas resistieran al menos 20 vueltas y diera resultado la estrategia propuesta. Por eso estiró la frenada (una maniobra que le salió con una perfección que le faltó en la largada) y marginó a su rival. El campeón eligió salir por la parte de afuera, ganó (una discutible) ventaja en la maniobra pero los comsiarios no consideraron necesario intervenir. Ventaja Hamilton.
¿Undercut? ¡Imposible!: En aire sucio, las blandas del RedBull se desgastaron más de lo previsto y verstappen debió adelantar su detención a la vuelta 14. Las duras eran la única opción porque la lógica indicaba una sola detención. Mercedes respondió al giro siguiente aunque las cubiertas medias del líder todavía conservaban rendimiento. La vuelta de salida del coche azul es 1s5 más veloz que la del negro. Pero al ordenarse, detrás de Sergio Pérez,
la diferencia seguía siendo de 5s192. Ventaja Hamilton.
Pérez se defiende: Con gomas frescas, el inglés recortó con premura la ventaja que le llevaba el mexicano, líder de la carrera. En la vuelta 20 lo alcanza. Pero la fabulosa y defensa de la vanguardia por parte del segundo piloto de RedBull, perfe le hace perder 5 segundos en una vuelta! Tiempos de 1m33s443 contra 1m28s387, mientras Pérez marca 1m34s359). El RedBull #33 descuenta hasta ponerse a 1s746: "Checo es una leyenda", sentencia su piloto. Las maniobras defensivas parecieron absolutamente legales. "Eso es manejo peligroso", se quejó Hamilton. Ventaja Verstappen.
Mitad de carrera: Vuelta 29, la ayuda que Pérez le ha proporcionado a Verstappen se vapora, y el deficit respecto del líder ahora es de 4s053. El W12 camina mejor que el RB16B con neumáticos duros. "Es un largo trecho para que duren estas gomas", afirma el inglés. "Si tuviéramos que parar por un Safety Car, ¿qué cubiertas preferirías?", le pregunta Peter Bonnington, su ingeniero. "Cualquiera de las dos se sienten bien", es la respuesta desde el Mercedes #44. La tensión crece con cada giro. Ventaja Hamilton.
VSC. Hay aroma a segunda detención para el RedBull cuando Antonio Giovinazzi estaciona su Alfa Romeo, durante la vuelta 34. Es su última carrera en la Fórmula 1 y ha durado apenas ocho vueltas más que su compañero, la leyenda Kimi Raikkonen. "Michael, por favor, que no haya un safety car interfiriendo con la carrera. Por favor, no", le pide por radio Toto Wolff, el team principal de Mercedes, al director de la prueba, el controvertido Michael Masi. RedBull efectiviza esa segunda parada, pero dada la cantidad de vueltas que quedan hasta la bandera a cuadros, le colocan cubiertas duras, en lugar de las blandas que podrían darle una ventaja mínima. Se produce este diálogo entre Hamilton y su box.
-La diferencia a Verstappen es de 17s9
-¿Cómo no perdió 22s (con la parada)?
-Virtual Safety Car
-¿Vamos a estar en problemas?
-Va a necesitar recortar ocho décimas de segundo por vuelta para alcanzarte?
(...)
-Fue un poco riesgoso dejarme afuera, ¿no?
-El riesgo de perder la posición en pista era muy alto
Ventaja iguales.
Safety-Car. Cuando faltan 9 vueltas para terminar y su piloto no consigue reducir esas ocho décimas por giro que precisa, Christian Horner, el team principal de RedBull, reconoce en voz alta que "Max va a necesitar un milagro". En ese giro, la diferencia exacta es de 11s105. El Mercedes pone un nutrido grupo de autos (y sus pilotos, Fernando Alonso, Esteban Ocon, Daniel Ricciardo y Charles Leclerc), que pelean por el séptimo lugar, entre él y el RedBull. Parece Ventaja Hamilton. Pero seis giros antes del final, después de una batalla perdida contra el Haas de Mick Schumacher, Nicholas Latifi estampa su Williams contra las barreras. Se cumple la peor pesadilla de Wolff. RedBull trae a Verstappen a boxes para calzarle, ahora sí, cubiertas blandas. Mercedes no quiere ceder la posición en pista, que es crucial para la aspiración de Hamilton, pero sus cubiertas ya sufren casi 40 vueltas de uso. Ventaja Verstappen.
Rezagados. La demora en quitar el Williams lleva inquietud a RedBull: ¿quedarán vueltas de carrera como para intentar la hazaña? Martin Brundle comenta: "Verstappen tiene gomas frescas, las de Hamilton están muy usadas. RedBull no tiene nada que perder, pero ¿tendremos más vueltas de carrera? En ese caso, Verstappen tiene gomas para ir por ello". Pero también tiene un grupo de rezagados entre él y Hamilton.
-¿Cómo es la situación?-pregunta el inglés a Bonnington.
-Quedarán cuatro vueltas cuando cruces la línea. Podría no reiniciarse.
-¿Estará justo detrás mío?
-Estará una vez que se ordene todo
-¿Con gomas nuevas?
La dirección de la carrera anuncia que los rezagados no dejarán paso, a diferencia de lo que ha sucedido en carreras anteriores. Eso es Ventaja Hamilton. "Típico", reacciona con ironía su rival, cuando faltan poco menos que dos vueltas para terminar. "No me sorprende". Jolyon Palmer, el expiloto de Fórmula 1 que ahora analiza los Grands Prix para la radio oficial británica (BBC), admite que no puede "entender la lógica pero parece que, porque los rezagados no pueden superar (al SC), habrá cinco autos entre Hamilton y Verstappen. Siento que hoy RedBull tuvo dos grandes decisiones contra ellos. Había muchas mejores maneras para que esto se decidiera limpia y deportivamente". Más que Ventaja Hamilton, era match-point.
Pero un giro más tarde, la dirección de la carrera se rectifica: los rezagados se evaporarán de la escena, y habrá batalla. (Y después de la carrera se discutirá si había que relanzar la prueba: Mercedes argumenta que, de acuerdo al reglamento, faltó una vuelta entre la pista limpia, el paso de los rezagados y la nueva largada). "Esta decisión va a ser muy comentada en términos de las reglas del SC. Muy difícil para mí tener un juicio claro, entiendo que no vayan a estar contentos con ello", opina Alain Prost. Si para él es difícil... Una vuelta para decidir el título mundial. Pero la balanza está inclinada. "Era como usar un cuchillo para pelear contra una pistola", lo graficó Mark Webber, expiloto de RedBull en F-1. "Pero Max hizo su trabajo". Ventaja Verstappen.
Última vuelta. Verstappen captura la punta en la frenada de la curva 5, la defiende doblando ancho: puede ser un tanto controversial, ¡pero está peleando el título! Flamea su RedBull a lo largo de la recta hacia la curva 6 y cubre el interno de cualquier ataque. Hamilton intenta su última reacción camino a la curva 9, las ruedas de ambos autos se acercan al límite, Verstappen conserva la cuerda y al doblar primero se encuentras con el camino despejado hacia la corona. Ha punteado menos de 5 kilómetros de un Grand Prix de 300, pero le sobra. Como decía el querido Luis Di Palma, múltiple campeón argentino de automovilismo, protagonista de mil rueda a rueda: "No quiero ir todas las vueltas en punta, con una me alcanza, basta con que sea la última..."
10 victorias, 10 poles, 18 podios (sobre 22 posibles), el 69,5 por ciento de los puntos posibles, números de ensueño para quien ha conquistado la corona más disputada de la historia. "Max es humano pero uno excepcional”, lo elogia David Coulthard, otro exRedBull en F-1, quien asegura que es “brillante y divisivo como Michael Schumacher y Ayrton Senna: corre con la postura de ir por la puerta cuando está abierta”.
¿Esto ya es historia pura?
No: Mercedes protestó la maniobra de Verstappen emparejando la línea de marcha de Hamilton en el relanzamiento, y señaló que no todos los rezagados debían dejar paso, señalado violaciones a los artículos 48.8 y 48.12 del Código Deportivo de la FIA, por lo que reclama que la clasificación de la carrera se dé con 57 vueltas cumplidas. "¿Qué tengo para decir? Nada: esto resume un poco lo que fue el campeonato", señala Verstappen. "Mercedes está básicamente protestando contra la FIA antes que contra nada que RedBull haya hecho", opina Palmer. "Este es un deporte complejo, a nadie le gusta que se tomen decisiones en la oficina de los comisarios una vez que se descorchó el champán", reflexiona Coulthard. "Pero los comisarios podrían haber hecho un trabajo más prolijo". Según Mattia Binotto, el team principal de Ferrari, es "normal que Mercedes proceda así y proteste. Para la FIA no ha sido fácil juzgar. Cualquier decisión deja a alguien descontento. Pero eso es parte del juego. De mi parte confío en cómo han operado".
Dos horas y media después del podio, los dos equipos fueron a un meeting con el director Masi. La representación de Mercedes incluía un abogado, según la periodista Jennie Gow. RedBull argumenta que ellos son "un equipo de carreras" y que no llevan un representante legal...
A las 23:04 de AbuDhabi, ambos equipos conocieron la decisión. Y Horner confirma a los medios que Max es el campeón...
2 Comentarios
Excelente reseña de una final inolvidable, gracias por compartir su conocimiento y puntos de vista con sus lectores.
ResponderBorrarLa gran pregunta es si tiene razón Mercedes en la protesta o no. Nadie habla de eso. Yo quise y quiero que Max sea el campeón porque no me banco al otro piloto pero podría alguien dar su opinión valedera acerca de lo que el reglamento dice en esta situación?
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